Robinho da la luz a Brasil
Chile sucumbió al talento y la canarinha está en cuartos
Pedro P. San Martín | 29/06/2010
Treinta y cuatro minutos le duró la pizarra a Marcelo Bielsa. Justo hasta que Chile se descosió por unos de los puntos débiles previsibles: córner, remate de cabeza de Juan y adiós a la ilusión de La Rojita. No quedaría ahí el golpe, porque cuatro minutos después Robinho sacó petróleo de un contragolpe, para hilvanar con Kaká y éste ceder a Luis Fabiano en el segundo de la noche. Adiós ilusiones, adiós querido enemigo.
Otra vez el fútbol imaginativo superaba a la estrechez táctica. Brasil estuvo por encima de Bielsa y, afortunadamente, también de Dunga. Robinho dio la luz a la canarinha cuando Chile estaba apretando como todos imaginábamos que lo haría. Con un par de driblings, dos salidas en diagonal y buen criterio en ataque, el ex madridista hizo añicos el dispositivo defensivo rival. Un dispositivo, por cierto, mucho más frágil atrás de lo que vimos ante España. Las bajas se dejaron sentir en Chile y aguantó mucho menos de lo esperado.
Brasil soportó con oficio la presión casi hombre a hombre que dispuso Bielsa. Kaká siempre tenía a Contreras en el cogote, prácticamente en un marcaje individual. Pero la Penta sacó ayer a relucir la virtud de la que tanto presume Dunga: es casi perfecta en el esquema defensivo. Lucio y Juan, con Maicon y Bastos por los laterales, son incontestables. Mark González, Alexis Sánchez y no digamos Suazo, bajísimo de forma, no encontraron una sola fisura en el muro canarinho.
El tercero.
Bielsa no es un tipo sin ideas y en el descanso intentó dar un cambio al escenario con Valdivia. La verdad es que el talentoso centrocampista del Al Ain hizo virguerías. Manejó, tocó, reactivó a Chile y Brasil se encogió esperando acontecimientos. No fue, sin embargo, más que un espejismo momentáneo, porque Robinho dio la tercera ración de cianuro a Chile en una contra. Esto tiene el sistema de presión, cuando te descuidas, la defensa se queda desnuda.
Parecía increíble que Chile no encontrara más que castigo en el partido, cuando su lucha era brava y generosa. Pero Suazo y compañía estaban ciegos ante el gol. Crearon ocasiones, apretaron, fueron orgullosamente a por todas, pero allí había dos torres que eran de oro: Juan y Lucio, soberbios.
Brasil se dejó querer en los últimos minutos como un tigre dormido. En estas, Kaká quiso aparecer con algún movimiento interesante, pero sigue muy lejos de llegar al notable. No es la mejor versión del brasileño, ni mucho menos. Robinho y Luis Fabiano ¡qué trabajo el suyo! se encargaban de poner a Chile en su sitio en cuanto crecía. No había más película: el oficio de la Penta acabó con el entusiasmo de los guerreros de Bielsa. Se mete en cuartos y crece y crece.
Claro penalti a lucio en el 27'
Con el marcador a cero y en el minuto 27, Contreras trabó a Lucio en una jugada revuelta en el área. El árbitro se desentendió, quizás porque Lucio exageró tanto la caída que pareció fingir. Fue penalti.
http://www.as.com/futbol/articulo/robinho-da-luz-brasil/dasftb/20100629dasdaiftb_40/Tes
martes, junio 29, 2010
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